Comenzado el oficio de muerte; una joven entra a la iglesia y se acopla delante del féretro y llora palabras de pena :
- ¿ Es posible que estando tú muerto tenga yo vida ?-
- ¡ No dudes jamás de mi fe hacia ti; perdona mi tardanza que al instante contigo me tendrás !-
-¡ Mi desconsolado corazón llora por tu amor; es como una daga que se inca en mi pecho y me hace sufrir de pasión ¡.
- ¡ Muerto tú, ya no vale mi vivir !.-
En la iglesia el silencio había llenado todos los rincones y las personas asistían a unos acontecimientos nada comunes.
La chica se despojó de su negro velo e inclinó su cara hacia los labios del difunto. El beso es la confirmación del mutuo amor profesado hacia tiempo. En esos instantes, los asistentes se acercan a retirarla del féretro por su osadía y comprueban que ha fallecido. Una muerte por amor doloroso.
Domenec, en unos asientos más atrás, queda petrificado ante el espectáculo que veían sus ojos. Aunque más perplejo queda al observar que su joven esposa es la que ha muerto. No se explica lo sucedido al ir hacia ella; pero comprende los hechos pues su mujer le había relatado en la noche anterior, una historia de un amante que tuvo en tiempos pasados.
Domenec dormía cuando su reciente esposa lo llama con desesperación porque un hombre ha fallecido en su habitación.
Le cuenta que su honra no ha sido mancillada y que su honor es más fuerte que la tentación. - ¡Ese es Arnaldo !, mi joven prometido.
Confuso como si estuviese en sueños, coge al fallecido y lo deja en la puerta de su casa para que lo ampare su familia y no verse involucrado en nada. A su regreso, su esposa le cuenta la historia de su vida.
Este osado amante había llegado a su casa, tras cinco años de peregrinar por los mundos, y se entera de la boda de su prometida. Sin poder conciliar el sueño, sale de su casa, se adentra , sin ser visto, en los aposentos de Dafne, la joven esposa y amante, para pedirle explicaciones .
Pero el reciente matrimonio llega. Domenec quiere ejercer su derecho de marido y Dafne le ruega que se abstenga por aquella noche porque es la única que le falta para cumplir un voto prometido. El marido insiste pero ella se niega replicando que no es justo gozar contra su gusto a ninguna mujer. Se lo ruega entre sollozos y lágrimas consiguiendo que su esposo ceda y se vaya a dormir.
Arnaldo , entre las cortinas , se presenta, quedando Dafne espantada y sin saber como actuar. El joven le profesa su amor diciéndole: " Te confieso que te amo aún más que antes y que por ti moriría y padecería todo el dolor. Prefiero morir a perderte. Sólo te pido un beso en premio a mi fe por el presente dolor y por el bien pasado ".
Ella, responde con pena :" Te amo como nunca pero ya me casé y no soy mía, estoy, aunque no muerta, ya enterrada y no te puedo dar lo que es de otro ". Ante la nueva negación, Arnaldo le dice - ¡ Adiós !-.
Dafne lo llama pero observa que ha fallecido en el suelo. Queda sin habla y llama a Domenec, su marido, que duerme en otra habitación.
Arnaldo había vuelto de surcar tierra y mar para conseguir dinero suficiente para casarse con Dafne pues el padre de ella rechazaba la unión de ambos , no por ser éste un campesino sino por no poseer dinero suficiente para dar dignidad a su hija. Así que el joven tuvo que partir para conseguir riquezas para poder contentar al padre de su joven amante. Al pasar el tiempo y no volver fue cuando la joven tuvo que aceptar, ante la insistencia de su padre, a Domenec, un hombre mayor y rico, por esposo.
Conozco la historia de los amantes de Teruel
ResponderEliminary los estuve visitando en una ocasion.
interesante texto, un placer leerte.
feliz semana.
Hermosa Leyenda que traspasa y recrea el amor en toda su dimensión.
ResponderEliminarUn abrazo.
Vaya, buena adaptación Silencio.
ResponderEliminarPreciosa historia la de estos amantes, tonta ella y tonto él, jajaja.
Perdona pero no he podido reprimir el chiste.
Un beso.
Buena adaptación! pero... x q será q te gustó a ti? jaja Besos
ResponderEliminarTu adaptación es una obra de arte, tu vida un misterio delicioso.
ResponderEliminarBesos, cariñitos y mucha fuerza.
Lía.
Muy bella obra
ResponderEliminarun besazo
¿Que tal las amantes de Teruel? Así tu adaptación me envuelve más. ¡Que bien escribe Silencio mío!...ja,ja,ja...y como dice Lía, que misterio te envuelve.
ResponderEliminarUn abrazo y fuerza.
Conozco la historia de los amantes de Teruel , me impresionó cuando estuve allí.
ResponderEliminarMuy buena adaptación la tuya silencio , hasta con tus misterios.
Un beso, Vicky.
Una historia mil veces repetida, mil veces contada, mil veces sufrida, mil veces llorada, y esta vez escrita de modo sublime y leida con admiración.
ResponderEliminarPrecioso todo el contenido del post , los amores verdaderos son a si tormentosos... amores y desamores... que mueren de amores....un relato maravilloso donde el amor es intenso fuerte y verdadero.
ResponderEliminarUn abrazo de MA, y gracias por tu felicitación de amistad bloguera dejada con cariño en mi blog , encantada de que luzca en tu maravilloso blog. esa preciosa mariposa dela amistad.
Era necesaria esta adaptación, lo que ocurre es que las has mejorado mucho, los Amantes de Teruel ya jamás serán los mismos, pues aparte de su infinito amor ahora también tendrán tu ternura.
ResponderEliminarBesitos.
Brillante adaptación, fabulosa la narrativa con que te expresas.
ResponderEliminar¡ole! me has dejado en esta mañana un buen sabor de boca Silencio.
Buen fin de semana y un para de besos.
PRECIOSA ENTRADA, felicidades,
ResponderEliminarQue tengas un bello fin de semana.
un abrazo
Un placer leerte:Saludos
ResponderEliminarUnas letras preciosas y tristes estas que adaptastes sobre los amantes de Teruel, a veces por amor hay quien es capaz de muchas locuras, hasta de desear la muerte, como fue el caso de estos amantes.
ResponderEliminarBeeesos.
muy bueno, no conocia ni una ni otra...
ResponderEliminardruida
Amantes y Amor, una historia bellamente contada, aunque triste, me encantó como la has adaptado.
ResponderEliminarabrazos Silencio.
Imprsionante!
ResponderEliminarBuena adaptacion, aunque las historias de amor nos dejan este sabor amargo, a veces.
ResponderEliminarBesos